Beltaine, el fuego de la fertilidad

Las grandes fiestas celtas utilizan el fuego en la tierra como símbolo del sol en el cielo. A través de rituales, los celtas aseguraban la benevolencia del sol en los ciclos anuales.

A medio camino entre el equinoccio de primavera y el solsticio de verano, Beltaine es la fiesta del fuego de Bel, desde la puesta del sol del 30 de abril al 1 de mayo, simbolizando el regreso del calor del sol, fuente de luz que fecundará las semillas. Beltaine es entonces el símbolo de la fertilidad pero también de la alegría de vivir.
Desde un punto de vista mitológico Beltaine, simboliza la unión de Cernunnos con la diosa madre. Cernunnos es la deidad celta de la naturaleza, que refleja el ciclo de la vida, desde la germinación hasta la muerte, y también representa la potencia masculina y la fertilidad. De su unión, el mundo se vuelve fecundo y vigoroso. Al igual que con Samain (noche del 30 de octubre al 1 de noviembre), las fronteras con el Otro Mundo se hacen más delgadas durante Beltaine. Entonces es imprudente ofender a los espíritus que podrían estar merodeando.

Representación de Cernunnos, copia del caldero de Gundestrup. (c) Céline G./Energia Spirit

Tradicionalmente, en esta fecha, se planta en el suelo un mástil con distintos lazos, y alrededor de él se realiza un baile. El mismo mástil simboliza el falo que fecundará la tierra. Se encienden hogueras para celebrar el verano, para que el sol caliente la tierra. Sin embargo, antes de ser sinónimo de alegría, estos fuegos eran sobre todo fuegos de purificación y protección contra enfermedades, eventos climáticos, etc. De hecho, Beltaine abre la temporada de pastoreo. Según la costumbre relatada por Cormac en el siglo IX, los druidas encendían dos fuegos, entre los que se pasaba el ganado, un ritual de fertilidad y purificación para proteger al ganado de enfermedades.

Feliz Beltaine

Beltaine, por lo tanto, da la bienvenida al verano y al calor del sol que hace madurar las cosechas.
Como el sol, el fuego da vida y la destruye. El fuego limpia, purifica. De sus cenizas renace una fértil vegetación.
Saltar sobre el fuego de Beltaine mejoraba la fertilidad y traía buena suerte. Beltaine simboliza no solo la fertilidad, sino también la alegría de vivir en sus placeres más terrenales.

¿Cómo celebrar Beltaine?
Reúnanse alrededor de un fuego o unas cuantas velas que simbolizarán este elemento fuego. También puedes embellecer tu espacio con flores recién cortadas. Con consciencia, pasad o saltad este fuego que os protegerá y os purificará.
Y si te apetece, construye un mástil de Beltaine, con varias cintas de colores, plántalo en el suelo y ¡baila alrededor de él!
Aprovecha este período fértil para sembrar semillas o plantar brotes de árboles jóvenes.

¡Celebra el amor, la abundancia, la alegría!

Beltaine, la fête du feu de la fertilité

Les grandes fêtes celtiques utilisent le feu sur la terre comme symbolique du soleil dans le ciel. Par des rituels, les celtes s’assuraient de la bienveillance du soleil dans les cycles annuels.

À mi-chemin entre l’équinoxe de printemps et le solstice d’été, Beltaine est la fête du feu de Bel, du coucher du soleil du 30 avril à celui du 1er mai, symbolisant le retour de la chaleur du soleil, source de lumière qui va fertiliser les semences. Beltaine est alors le symbole de la fertilité mais aussi de la joie de vivre.

D’un point de vue mythologique Beltaine, symbolise l’union de Cernunnos avec la déesse mère. Cernunnos est la déité celte de la nature, reflétant le cycle de la vie, de la germination à la mort, et représente aussi la puissance masculine et la fécondité.  De leur union, le monde devient fécond et vigoureux. Comme pour Samain (nuit du 30 octobre au 1er novembre), les frontières avec l’Autre Monde devenaient plus minces pendant Beltaine. Il restait alors imprudent d’offenser les esprits qui pouvaient rôder alentour.

Représentation de Cernunnos, copie du chaudron de Gundestrup. (c) Céline G./Energia Spirit

Traditionnellement à cette date, un mât enrubanné est planté dans le sol, et une danse se réalise autour. Le mât en lui-même symbolise le phallus qui va fertiliser la terre.  Des feux de joie sont allumés pour célébrer l’été, pour amener le soleil à réchauffer la terre. Néanmoins, avant d’être synonymes de joie, ces feux étaient avant tout des feux de purification et de protection contre les maladies, les événements climatiques, etc. En effet, Beltaine ouvre la saison du pâturage. Selon la coutume rapportée par Cormac au IXè siècle, les druides allumaient deux feux, entre lesquels on faisait passer le bétail, rituel de fécondité et de purification pour protéger le bétail contre la maladie.

Beltaine accueille donc l’été et la chaleur du soleil qui fait mûrir les cultures.

Comme le soleil, le feu donne la vie et la détruit. Le feu nettoie, purifie. De ses cendres, renaît une végétation fertile.

Sauter par-dessus le feu de Beltaine renforçait la fertilité et portait chance. Beltaine symbolise non seulement la fertilité, mais aussi la joie de vivre dans ses plaisirs plus terrestres.

Comment fêter Beltaine ?
Rassemblez-vous autour d’un feu ou de quelques bougies qui symboliseront cet élément feu. Vous pouvez aussi embellir votre espace avec des fleurs fraîchement cueillies. Avec conscience, passez ou sautez au-dessus de ce feu qui vous protégera et purifiera.

Et si l’envie vous prend, construisez un mât de Beltaine, avec plusieurs rubans de couleurs, plantez – le dans la terre et danser autour !

Profitez de cette période fertile pour semer des graines ou planter de jeunes pousses d’arbres.

Célébrez l’amour, l’abondance, la joie !

La fumigación, como medio de limpieza

La fumigación consiste en quemar hojas o tallos de algunas plantas para realizar una limpieza del lugar (casas, templos, hospitales…) o de las personas, para alejar enfermedades y malos espiritus, entrar en contacto con difuntos o hasta entrar en un estado alterado de conciencia. En distintas culturas del planeta, desde Rusia a Europa, de Oriente a América, se practica la fumigación.

En China, son mas de 400 especies vegetales que pueden ser usados como inciensos: ciprés (Cupressus funebris), gaulteria olorosa (Gaultheria fragrantissima), alheña (Ligustrum sempervirens), pistachero (Pistacia weinmannifolia), enebro (Juniperus squamata) o cerezo silvestre (Cornus oblonga).

En « the Indian Journal of Otology », se publico en 2018 un estudio científico 1, cuyo objetivo era de reducir las infecciones nosocomiales en servicio ambulatorio ORL. Realizaron pruebas fumigando con madera de mango o de pipal con plantas medicinales (en particular, el havan sámagri, utilizado en ofrendas para el fuego en toda la India) en un entorno interior. Consiguieron como resultados, que el humo de la fumigacion con plantas medicinales provocó una reducción de más del 95% de los recuentos bacterianos aéreos en 60 minutos.

En Mesoamérica, los mayas y otras etnias de la región usaron y siguen usando el copal, una resina, que se da en ofrenda al fuego para honrar a los espíritus y deidades, así como terapia para diferentes males físicos y espirituales.

Durante nuestro viaje a Igarapé do Caucho, las mujeres pajé (chamanas), Biruani y Maspã nos fumigaron en la maloca con hojas de plantas puestas en brasas. Mientras se realizaban discursos, un niño aprendiz se acercó para mover las hojas.

Foto: (c) Céline Godeux

En Europa, como en América, solemos usar la salvia blanca. En Europa, podemos tradicionalmente quemar romero para encarnar un cambio.

En México y EEUU, usan la Yerba Santa para abrir el corazón y fomentar la autoestima.

En Kirguistán, se usan pequeños ramos de un tipo de conífera local, para sanear las yurtas y casas.

Otras resinas fomentan el bienestar como el benjuí, el olíbano, la mirra…

Una vez se fumiga un lugar, es importante abrir las ventanas, así como quitar el polvo que se podía haber creado ya que contiene miasmas neutralizados por el humo de las plantas medicinales.

Fuente:

1: Effect of smoke from medicinal herbs on the nosocomial infections in ENT outpatient department, January 2018, Indian Journal of Otology 24(1):9. DOI:10.4103/indianjotol.INDIANJOTOL_143_16

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Yule, la vuelta de la luz

En el siglo IV, los cristianos representaban una minoría distribuida de manera muy desigual en el Imperio Romano, principalmente en Oriente y norte de África. El emperador Constantino I fue al principio un pagano politeísta que honraba a Sol Invictus, a pesar de que llevaba mucho tiempo interesado en el cristianismo. Finalmente, Constantino adoptó el cristianismo como su religión personal e hizo del día del sol pagano (dies solis), el domingo, un día legal de descanso. Poco a poco con Constantino I, lo que se exige en toda Europa es una religión única, un calendario único y la prohibición de otras culturas.

“Casi imperceptiblemente, las costumbres paganas se infiltraron en la Iglesia; La conversión nominal del emperador a principios del siglo IV provocó un gran regocijo: el mundo, cubierto con un manto de justicia, entró en el cristianismo de Roma. Entonces, la obra de la corrupción progresó rápidamente. El paganismo parecía conquistado, mientras que en verdad resultó victorioso: su espíritu gobernaba ahora la Iglesia romana. Poblaciones enteras que, a pesar de su abjuración, eran paganas por sus costumbres, gustos, prejuicios e ignorancia, pasaban bajo los estándares cristianos con su bagaje de creencias y prácticas supersticiosas. El cristianismo en Roma adoptó e integró gran parte del sistema del antiguo culto imperial, así como sus festividades, todas con colores más o menos cristianos. « – Arthur Beugnot

La religión ha modelado su calendario sobre las creencias precristianas. Jesús encarna la palabra y la luz y, por lo tanto, no es casualidad que el nacimiento de Cristo se produzca en un período en el que se celebra la luz.
Tendremos que esperar hasta el siglo XX para ver reaparecer nuestras raíces espirituales y culturales.
La palabra « Navidad » proviene de « nuevo helios », el nacimiento de un nuevo sol, el nuevo « heol »: heol que significa sol en bretón. Mientras que el término Yule nos viene del norte escandinavo. Yule es la celebración del medio del invierno que simboliza el regreso de la luz.

En las tradiciones paganas, desde el solsticio, había 12 noches: cada una de estas noches daba a luz el mes correspondiente del año siguiente. Llamados « los viejos tiempos » o la « vieja semana » en el druidismo, durante estos 12 días, anotamos lo que sucedió en cada uno de estos días para predecir lo que sucedería el año siguiente. Esta época del año fue propicia para la inactividad y la introspección.

Hoy podemos celebrar este pasaje a la luz y un regreso a uno mismo con sencillos rituales:
• Enciende velas, baila, canta,
• Escribe en una hoja de papel lo que quieres ver transformado y luego quémalo en el fuego.
• Camina por el bosque y recolecta piñas, frutos para hacer un altar natural que puedes completar con hidromiel, un tronco natural, ramas, hiedra, velas como símbolo de luz.

En cualquier caso, lo más importante es la intención puesta en cada objeto. Por supuesto, se puede invitar a sus antepasados ​​a unirse al ritual. También se puede orientar su ritual siguiendo las 4 direcciones: el Este como una representación del aire, el Norte que lleva la tierra, el Sur conectado al fuego, el Oeste para la energía del agua.

En esta época del año, las energías telúricas están en su punto más bajo mientras que las energías cósmicas están en su punto más alto. Reduzca la velocidad, déjese llevar por la introspección. Haga un balance de este año.

Mientras la tierra se alimenta de hojas muertas que caen en otoño, nuestro ser se alimenta de experiencias del pasado. Agradezcamos estas oportunidades, transformémoslas en un recurso para impulsarnos mejor hacia nuestro futuro, hacia un próspero año nuevo.

Fuente:
Beugnot A. (1835), Historia de la destrucción del paganismo en Occidente, vol. 2, pág. 264-266.

Yule, le retour de la lumière

Au IVè siècle, les chrétiens représentaient une minorité répartie très inégalement à travers l’Empire romain, essentiellement en Orient et en Afrique du Nord. L’empereur Constantin Ier était au départ un païen polythéiste qui honorait Sol Invictus, même s’il s’intéressait depuis longtemps au christianisme. Finalement Constantin finit par adopter le christianisme comme religion personnelle et fait du jour du soleil païen (dies solis), le dimanche, un jour de repos légal. Peu à peu avec Constantin Ier, ce qui s’impose dans toute l’Europe c’est une religion unique, un calendrier unique et une interdiction des autres cultures.

« Presque imperceptiblement, les coutumes païennes s’introduisirent dans l’Église ; la conversion nominale de l’empereur au début du IVe siècle causa de grandes réjouissances : le monde, couvert d’un manteau de justice, entra dans le christianisme de Rome. Alors, l’œuvre de la corruption fit de rapides progrès. Le paganisme paraissait vaincu, tandis qu’il était réellement vainqueur : son esprit dirigeait à présent l’Église romaine. Des populations entières qui, malgré leur abjuration, étaient païennes par leurs mœurs, goûts, préjugés et ignorance, passèrent sous les étendards chrétiens avec leur bagage de croyances et de pratiques superstitieuses. Le christianisme à Rome adopta et intégra une grande partie du système de l’ancien culte impérial ainsi que ses fêtes qui prirent toutes des couleurs plus ou moins chrétiennes. » – Arthur Beugnot

La religion a calqué son calendrier sur les croyances préchrétiennes. Jésus incarne le verbe et la lumière et ce n’est donc pas un hasard que la naissance du Christ tombe en période où la lumière est festoyée.

Il faudra attendre le 20e siècle pour voir réapparaitre nos racines spirituelles et culturelles.

Le mot « Noël » provient de « nouveau hélios », la naissance d’un nouveau soleil, le nouveau « heol » :  heol qui signifie soleil en Breton. Alors que le terme Yule nous arrive du Nord scandinave. Yule est la célébration du milieu de l’hiver qui symbolise le retour de la lumière

Dans les traditions païennes, à partir du solstice, on comptait 12 nuits : chacune de ces nuits enfantait le mois correspondant de l’an à venir. Appelés « les vieux jours » ou la « vieille semaine » dans le druidisme, pendant ces 12 jours, on notait ce qui se passait à chacun de ces jours afin de prévoir ce qui allait se passer l’année qui suivait. Cette période de l’année était propice à l’inactivité et l’introspection.

Aujourd’hui, nous pouvons célébrer ce passage à la lumière et un retour à soi avec des simples rituels :

  • Allumer des bougies, danser, chanter,
  • Écrire sur un papier ce que vous souhaitez voir transformé pour ensuite le brûler dans le feu 
  • Se promener dans les bois et récolter des pommes de pin, des fruits pour faire un autel naturel que vous pouvez compléter avec de l’hydromel, une bûche naturelle, des branchages, du lierre, des chandelles comme symbole de lumière.

Dans tous les cas, le plus important c’est l’intention mise dans chaque objet. Vous pouvez bien entendu inviter vos ancêtres à se joindre au rituel. Vous pouvez aussi orienter votre rituel en suivant les 4 directions : l’est comme représentation de l’air, le nord portant la terre, le sud connecté au feu, l’ouest pour l’énergie de l’eau.

En cette période de l’année, les énergies telluriques sont au plus bas alors que les énergies cosmiques sont au plus haut. Ralentissez, laissez-vous porter par une introspection. Faites le bilan de cette année.

Comme la terre se nourrit des feuilles mortes tombées à l’automne, notre être se nourrit des expériences du passé. Remercions ces opportunités, transformons-les en ressource pour mieux nous impulser vers notre futur, vers une nouvelle année prospère.

Source :

Beugnot A. (1835), Histoire de la destruction du paganisme en Occident, vol. 2, p. 264-266.

Qu’est-ce que la P.N.L. ?

La Programmation Neurolinguistique, ou en abrégé P.N.L., est un mode de lecture de l’expérience individuelle et subjective, et de la compréhension des réalités psychologiques observables dans le comportement.

En d’autres termes, selon Robert Dilts, la P.N.L. décrit « comment les interactions entre la pensée (Neuro) et le langage (Linguistique) organisent le fonctionnement de notre corps et de nos comportements (Programmation) et les résultats que nous obtenons. »

La PNL émerge dans les années 70, avec les recherches de Richard Bandler et John Grinder, à l’Université de Santa Cruz (Californie), qui vont modéliser les processus cognitifs et comportementaux de personnes réussissant parmi ces trois courants principaux :

  • L’approche thérapeutique comportementale de Fritz Perls (Gestalt), Virginia Satir (thérapie familiale) et Milton Erickson (hypnothérapie);
  • Des travaux de l’Ecole de Palo alto, représentée par Gregory Bateson, Paul Watzlawick, Edward T. Hall
  • La psychologie cognitive.

Et en observant ces différents modèles de référence, ils vont extraire les processus et facteurs d’excellence en matière de communication pour ensuite définir différentes techniques destinées à améliorer la connaissance de soi, à s’accomplir, à gagner en efficacité dans la communication ou la relation.

Le mot « programmation » fait référence aux « programmes » ou automatismes comportementaux, qui nous permettent une économie cognitive, afin de nous simplifier la vie, la prise de décision. Néanmoins, cette programmation peut être plus ou moins pertinente et adéquate.

Le mot « Neuro » nous rappelle que les données provenant de la perception sensorielle passent par un traitement du système nerveux, provoquant un état interne propre à l’expérience en cours. Ce sont les connexions neuronales via la collecte, le stockage et l’analyse de l’information qui vont nous permettre de nous adapter à notre environnement. En somme, notre comportement est la résultante de processus neurologiques.

« Linguistique », car le langage et les comportements reflètent l’état interne provoqué par l’expérience, i.e. qu’ils traduisent ce que l’on vit. Le langage structure la pensée. Néanmoins, c’est aussi à travers la sélection, la distorsion, la généralisation que nous tordons la réalité.

La PNL s’intéresse davantage au « comment » qu’au « pourquoi », et affirme que nous pouvons apprendre de l’expérience des autres personnes, car il y a des similitudes fondamentales entre nos systèmes nerveux. La PNL se veut avant tout pragmatique, utile et accessible.

Ainsi va le cycle de la vie…

La Nature nous enseigne combien tout peut émerger à nouveau, après une saison de pause, un hiver aride, une jachère.

« Dans la nature, absolument tout meurt pour ensuite renaitre. Il y a une dissolution suivie d’une illumination où la lumière revient. »

Sandra Ingerman

Si nous observons la Nature, nous pouvons voir comment celle-ci sait se reposer en hiver, pour mieux renaitre au printemps et donner le meilleur de soi en été, avant de diminuer son activité en automne. Et ainsi va le cycle de la vie.

Dans notre vie, nous pouvons rencontrer ces moments de jachère, ces moments de creux de vagues. Savoir s’arrêter pour mieux se reposer, avant de se préparer à émerger de nouveau est un des grands enseignements qu’il nous est parfois difficile d’admettre dans une société occidentale, qui court après le temps, à en perdre parfois le sens même de la vie.


Sachons prendre du recul, sachons nous arrêter, pour mieux rayonner avec fraicheur par la suite !

“Everything in nature is dying and then there is the rebirth that happens. There is a dissolution, and then there is an illumination where light comes back.”

Sandra Ingerman